Mauricio Brega1, Javier Baudracco1, Belén Lazzarini1, Mette Bouman2, Nicolás Lyons3 y Carlos Cuadrado4
1. Departamento de Producción Animal, Facultad de Ciencias Agrarias, Universidad Nacional del Litoral, Esperanza, Argentina.
2. LDS Uruguay, C. Cosmopolita, Uruguay.
3. Intensive Livestock Industries, NSW Department of Primary Industries, Menangle NSW, Australia
4. Tambero, productor de leche, Canterbury, Nueva Zelanda
El proceso de ordeño comienza cuando se buscan las vacas en la parcela. Un sistema de callejones bien diseñado, cuidadosamente construido y debidamente mantenido, contribuye a un mejor flujo de vacas. Los beneficios de un buen flujo de vacas son:
– Ordeños más rápidos.
– El personal está siempre más satisfecho cuando el rodeo fluye voluntariamente y menos propenso a enojarse con los animales.
– Cuando las vacas fluyen voluntariamente a través de los callejones y el corral de espera, las vacas llegan menos estresadas y bajan rápidamente la leche.
– Se observan en general menos problemas podales, menos mastitis y hay mejor salud del animal.
– Las vacas llegan más limpias a la sala de ordeño, lo que significa menor tiempo y menor cantidad de agua usada en el lavado de la ubre, por lo tanto se acortan los tiempos de ordeño.
– Se espera reducción de bacterias en leche, por lo tanto mejor calidad de leche.
Principios de diseño de callejones
Ancho de los callejones
Un lote de 200 vacas necesita un camino de cinco metros de ancho aprovechable. Para lotes más grandes se recomienda un metro más de ancho por cada 50 vacas extras, hasta aproximadamente ocho metros.
Pendiente de los callejones
Se debe asegurar que los callejones tengan un adecuado abovedado para permitir que el agua de lluvia escurra rápidamente. La pendiente recomendada para un callejón abovedado debe ser de entre 3-5%, desde el centro hacia cada cuneta lateral.
Si la pendiente del callejón es hacia un solo lado, se recomienda que no sea mayor al 5%. Pendientes laterales muy pronunciadas incomodan a las vacas para caminar, disminuyendo su velocidad (Figura 1).
Figura 1. Izquierda: Callejón con adecuada pendiente, se observa a las vacas caminando por el medio del mismo. Derecha: callejón con pendiente excesiva, que incomoda a las vacas al caminar.
Fuente dairynz.co.nz.
Los callejones que no tienen pendiente adecuada permiten que se acumule barro por varios días luego de una lluvia, lo cual resulta muy negativo para las personas que mueven las vacas y también para la salud y el bienestar de los animales.
Libre de distracciones
Cualquier objeto que se encuentre en el camino de las vacas (aguadas, máquinas, otros animales) será motivo de distracción, ya que las vacas suelen pararse o disminuir la velocidad para observar un objeto (Figura 2).
Figura 2. Izquierda: callejón libre de distracciones. Derecha: Callejón deteriorado y con distracciones (aguada), que disminuyen la velocidad del flujo de las vacas.
Fuente: Dairyn.co.nz. Foto: Brega.
Buenos alambrados
Debe asegurarse que los callejones tengan alambrados en buenas condiciones y que los canales de drenaje (cuneta) estén protegidos del paso de las vacas (Figura 3).
Figura 3: Esquema de callejón con alambres que impiden el paso de las vacas por la cuneta, pero a su vez permiten el trabajo de la maquinaria para el mantenimiento del mismo.
Fuente: Adaptado de www.cowtime.com.
Buen acceso a los potreros
El acceso o la salida de los potreros debe ser del mismo ancho que el callejón, de lo contrario se convertirá en un cuello de botella para el flujo de las vacas, se desgastará rápidamente el callejón y se formarán zonas de barro.
Construcción de los callejones
Principios a seguir
Si los callejones se van a construir desde el inicio, más allá de los materiales a utilizar hay ciertos principios a seguir:
– Remover todo el pasto que haya en la superficie del suelo.
– Construir una base sólida con materiales fuertes.
– Compactar adecuadamente.
– Proveer a las vacas de una superficie confortable para caminar.
– Construir un sistema de drenaje eficiente.
– Tener un programa de mantenimiento proactivo de callejones.
Materiales
Un buen callejón se construye por capas, una capa base y una capa superficial:
- La capa base provee soporte estructural a la capa superficial. Si la primera es débil, la capa superficial se romperá y el callejón colapsará. Para la capa base se pueden colocar 10-15 cm de tierra colorada e incorporar con rastra de disco, luego compactar con rolo pata de cabra. También se pueden adicionar algunos materiales como cal o cemento a la capa base para darle más fortaleza.
- La capa superficial tiene dos funciones: proveer a las vacas una superficie confortable para caminar y evitar que penetre el agua. La capa superficial puede confeccionarse con suelo cal y arena, lo que es una buena opción por su facilidad de manejo y da muy buenos resultados. Es Importante el mezclado de los primeros centímetros de tierra colorada con la cal. El momento óptimo para realizarlo es el invierno, ya que en verano la tierra colorada se seca mucho y en primavera se humedece demasiado.
Bibliografía y links de interés
– DairyNZ Limited. Disponible en: www.dairynz.co.nz. Acceso: 22/01/2017. Dairy Australia Limited. Disponible en: http://www.cowtime.com.au. Acceso: 25/01/2017.
– Taverna, M., Ghiano, J., Walter, E. Aportes de INTA antes el exceso de agua. 2012. Disponible en: inta.gob.ar/noticias/aportes-del-inta-ante-el-exceso-de-agua. Acceso: 15/12/2016.
– Taverna, M., Walter, E. 2008. Afirmado de callejones de tambo: Una situación que se agrava por el incremento del tamaño de los rodeos. Disponible en: inta.gob.ar/sites/default/…/script-tmp- ficha_1-afirmado_de_callejones_del_tambo.pdf. Acceso: 20/12/2016.
Mauricio Brega1, Javier Baudracco1, Belén Lazzarini1, Mette Bouman2, Nicolás Lyons3 y Carlos Cuadrado4
1. Departamento de Producción Animal, Facultad de Ciencias Agrarias, Universidad Nacional del Litoral, Esperanza, Argentina.
2. LDS Uruguay, C. Cosmopolita, Uruguay.
3. Intensive Livestock Industries, NSW Department of Primary Industries, Menangle NSW, Australia
4. Tambero, productor de leche, Canterbury, Nueva Zelanda
Las vacas necesitan consumir suficiente cantidad de agua para prevenir efectos negativos en su salud, bienestar y producción. Una pequeña restricción en el consumo de agua reduce el consumo de alimento por parte de la vaca, lo que a su vez reduce la producción de leche.
Los factores que más afectan el consumo de agua en vacas en producción son la temperatura ambiente, la producción de leche y el consumo de materia seca. Una vaca en producción consume aproximadamente 4 a 6 litros de agua por cada litro de leche producido; en épocas de altas temperaturas, en las que el animal se encuentra bajo estrés térmico, el consumo de agua puede llegar a duplicarse respecto a épocas frías.
Ubicación de las aguadas
Las vacas en pastoreo no deberían caminar más de 200 metros para llegar a una aguada, debido a que las distancias mayores de caminata aumentan el gasto energético y disminuyen el aprovechamiento de la pastura.
Cuando el suministro de agua se encuentra cercano al lugar de pastoreo, las vacas se desplazan hasta el agua −de forma individual o en pequeños grupos− con frecuencia. En cambio, si tienen que desplazarse largas distancias para beber se producen dos efectos adversos, el primero es que demoran en desplazarse y el segundo es que cuando se desplazan, siguiendo a las vacas dominantes, se quedan cerca de la aguada y no regresan a consumir pasturas, lo que afecta tanto el consumo de agua como de pasto, y consecuentemente la producción de leche.
Aguadas en el potrero
Proveer puntos de bebida en cada parcela mantendrá a las vacas pastoreando la mayor cantidad de tiempo, y como consecuencia consumirán más alimento y producirán más leche.
El suministro de agua en la parcela tiene además la ventaja de disminuir el movimiento de los animales, ya que muchas veces la insuficiente cantidad de aguadas hace que las personas deban mover los animales hasta la aguada, originando un esfuerzo innecesario.
Se puede suministrar agua en la parcela mediante un sistema de aguadas presurizadas, con cañerías subterráneas y bebederos móviles en la parcela (Figura 1), o acarrear el agua con tanques a cada parcela (Figura 2). Esto último tiene la desventaja de tener una demanda operativa importante, por lo que puede ser considerado sólo como una solución transitoria.
Figura 1: Sistema de suministro de agua en la parcela con cañerías subterráneas y bebederos móviles.
Fotos: Demarchi.
Figura 2: Tanque de agua móvil con bebedero en la parcela donde pastorean las vacas; las vacas beben en pequeños grupos o en forma individual.
Foto: Brega.
Aguadas en callejones
No es recomendable colocar bebederos en los callejones, debido a que representan una distracción para las vacas, haciendo que todo el rodeo disminuya el ritmo de caminata. Además generan una zona húmeda y contaminada que puede causar mayor cantidad de problemas podales y mayor requerimiento de mantenimiento de callejones (Figura 3).
Figura 3: Aguada en el callejón, que disminuye el flujo de las vacas y genera una zona húmeda en el mismo.
Foto: Brega.
Aguadas a la salida del ordeño
No es recomendable que las aguadas se encuentren inmediatamente a la salida de la sala, ya que esto reduce el flujo de las vacas y hace que estas se amontonen, dificultando la labor de las personas que trabajan en el tambo. Si se colocan aguadas a la salida del tambo (aunque no es recomendable) se debe tener la precaución que estas estén a un mínimo de 200 m desde la salida del tambo.
Aguadas en el corral de espera
No se recomienda instalar bebederos a los lados de corral de espera, debido a que afecta el flujo de las vacas e incrementa el movimiento dentro del corral de cemento, lo cual puede predisponer a desgaste de pezuñas e incremento de problemas podales.
Aguadas en el patio de comidas
En lo posible, se deben ubicar los bebederos alejados de los comederos para evitar que se forme una zona de barro. No deben estar muy alejados de la sombra, ya que de lo contrario, en épocas de calor, la vaca prioriza estar en la sombra antes que caminar para tomar agua.
Se debe afirmar o construir una vereda de hormigón alrededor de los bebederos para evitar formación de barro.
Aguadas que se necesitan según el rodeo
La cantidad de aguadas debe estar en relación a la superficie del campo y debe respetar una distancia máxima de caminata para los animales. Lo ideal es que los animales no caminen más de 200 metros para beber agua, lo que generalmente se consigue con una aguada cada 4 o 5 hectáreas, dependiendo de la forma del campo. Esto puede realizarse con un sistema de aguadas presurizadas, con cañerías enterradas y acoples en las parcelas donde se colocan los bebederos móviles.
Cálculo de requerimientos de agua
Se toma como referencia una vaca en ordeño (VO) que produce 25 litros por día (lt/día), que consume 100 lt/día, y una vaca seca (VS) que consume 50 lt/día más un margen de seguridad de 25% para ambos casos.
Ejemplo de cálculo:
Cantidad VT= 250
Cantidad VO = 250 VT x (80%VO/VT) = 200 VO
Cantidad VS = 50 VS
Consumo de agua VO = 200 VO x 100 lt/día (+ 25% seguridad) = 25.000 lt/día para VO Consumo de agua VS = 50 VS x 50 lt/día (+25% seguridad) = 3.125 lt/día para VS Consumo diario VT = 28.125 lt/día
Para el diseño de las aguadas de la parcela se toma como referencia el consumo de agua a la salida del ordeño. Como se dijo anteriormente, no se recomienda colocar aguadas a la salida de la sala de ordeño, sino que las vacas pueden ir a beber agua directamente a la parcela donde quedarán pastoreando.
Cálculo de capacidad de los bebederos y caudal
Para el rodeo de 200 VO, se toma como supuesto una instalación de 16 bajadas y se considera que las vacas consumen el 40% de su requerimiento a la salida del ordeño, dividido en dos ordeños (20 lt/ordeño).
Ejemplo de cálculo:
Consumo de agua por mangada = 16 vacas/mangada x 20 lt/vaca = 320 lt/mangada
Suponiendo que cada 8 minutos se libera una mangada
Caudal mínimo necesario = 320 lt/mangada / 8 minutos = 40 lt/minuto
Caudal mínimo necesario = 2.400 lt/hora
Bibliografía y links de interés
– DairyNZ Limited. Disponible en: www.dairynz.co.nz. Acceso: 22/01/2017.
– Dairy Australia Limited. Disponible en: http://www.cowtime.com.au. Acceso: 25/01/2017
– Taverna, M., Ghiano, J., Gastaldi, L., Walter, E. 2014. Estrés calórico. Enfriamiento de vacas mediante la combinación de mojado y ventilación forzada. Disponible en: http://inta.gob.ar/sites/default/files/script_tmp_inta_estres_calorico_sistema_ventilacion_y_asper sion_.pdf. Acceso: 27/01/2017.
– Valtorta, S. 2008. Sombra y agua para más leche. Producir XXI, Bs. As., 16(205):44-47. Disponible en: http://www.produccionanimal.com.ar/produccion_bovina_de_leche/instalaciones_tambo/28- sombra.pdf. Acceso 22/01/2017.